Haciendo un poco de Downhill en el Óvalo de Turmero.

   Luego de un par de semanas sin rodar por motivos laborales, nuevamente vuelvo a la pista. Como es costumbre el grupo de Whatsapp full activo y esta semana tuve poca participación en el, ya que estaba en otras actividades y guardando reposo por malestar general que afectó mi oído izquierdo, a pesar del “descanso” hoy sigo con el malestar del oído, el cual puede afectar mi equilibrio.

   El despertador sonó a las 4:35 am y la Gatialarma –El gatochento, aunque se llama Bagheera el gato de mi colega Biomavoelger- también, por suerte ya tenía todo listo desde la noche anterior, solo restaba el respectivo baño, calentar el desayuno y partir al lugar de encuentro para reunirnos con el resto de riders y seguir al siguiente punto de reunión y posteriormente tomar la vía directa hacia la población de Turmero, municipio Santiago Mariño, Edo. Aragua, nuestro destino: El Óvalo de Turmero, una pista para bicicletas.

   Como de costumbre, al salir de casa activé la aplicación Relive y Ride With GPS para registrar la ruta, junto a Biomavoelger como compañera de rutas ya en el punto de reunión esperamos pocos minutos al resto del grupo para ir al siguiente punto de encuentro y reunirnos con los hermanos de Cocobike y continuar hacia nuestro destino. El cielo estaba despejado y el recorrido estuvo suave con poca afluencia de vehículos, uno de nuestros muchachos tuvo un espiche, por lo que nos detuvimos a esperar mientras hacían la reparación respectiva.

El sol en la Av. Casanova Godoy.

   Ya en el famoso ovalo de Turmero, fuimos recibidos por el organizador y responsable del cuidado y mantenimiento del mismo, el Sr. Rafael –no recuerdo el apellido- conocido como Popo. El amigo “Popo” nos dio la bienvenida y una introducción al ciclismo de montaña y el proyecto que lleva a cabo para el mantenimiento de la pista y el nivel de dificultad de la misma, desde luego nos indicó las recomendaciones necesarias para transitar con seguridad y precaución dentro de la pista, haciendo énfasis en las Peraltes, Drops y saltos y el riesgo que implica el descenso cuando no se conocen las técnicas adecuadas para tal fin, por último, nos asignó un guía, el joven  Edgar Cisneros conocido como “Motoratón”.

Popo nos dio la bienvenida e indicaciones para el uso de la pista.

   Luego de recibir las instrucciones por parte de “Popo” y presentarnos a Motoratón como nuestro guía iniciamos el recorrido por el camino largo, colocamos la velocidad suave, es decir, Plato pequeño y piñón grande del rache, pues la necesitaríamos durante todo el ascenso. En este sentido, dos muchachas de nuestro equipo decidieron quedarse luego de escuchar las indicaciones de nuestro anfitrión, ojo no es miedo sino respeto preventivo. Entonces, arrancó Motoratón, todos asombrados porque esos primeros metros se vieron “fáciles”, cuando llegó mi turno, desastre, justo antes de agarrar el camino mi bicicleta hizo “Caballito” y obligándome a bajar de inmediato y hacer maniobras para no caerme y dejar caer la bicicleta –este fue el 1er tarascón del recorrido-.

Vista posterior al inicio del recorrido.

   Ese primer trayecto fue duro de pedalear ya que entre el desnivel y la pendiente del terreno prácticamente me obligó a ir caminando en los recodos y aprovechando los falsos planos y bajadas leves para pedalear con relativa tranquilidad hasta el siguiente recodo para pasarlo a duras penas o simplemente hacer pausa y bajarme y seguir a pie citando las pablaras de Motoratón “Poco a poco y sin apuro, aquí estamos para aprender…” (Cisneros com. pers. 2021.). Saliendo de la parte boscosa –un fragmento de bosque seco- el sendero bordea la montaña dando una vista panorámica de Turmero y zonas adyacentes y un falso plano donde se podía pedalear sin “problemas” salvo por el farallón al lado derecho del recorrido, venia una pareja de caminantes que se detuvo para darnos paso, luego nos detuvimos a recoger una botella de plástico con agua abandonada en el camino, ahí nos alcanzaron 2 riders “pro” que entrenaban para la competencia a realizarse próximamente.


   Llegamos a un área relativamente abierta donde nos detuvimos a descansar, esperar al resto del grupo y hacer algunas fotos-vídeos de un mini salto –yo no salté-. Al llegar los muchachos y entre risas surgieron los comentarios, caídas y tertulias del recorrido anterior, nuestro guía Motoraton nos dio unas indicaciones de como "entrompar" la subida que venía, es decir, la parte técnica del ascenso, la cual realicé sin dificultad para llegar a otro sector plano parecido a la letra Y, hacia la izquierda los caminantes y ciclistas hacia la derecha, los muchachos ya se habían ido para seguir el sendero, como había embotellamiento, alcancé a los muchachos y me sugirieron hacer un videíto para las redes, así que regresé a la entrada del camino para el vídeo en cuestión.

Todo el recorrido está plenamente identificado.

   ¡Llegamos a la cima! El punto de retorno para realizar el descenso, nuevamente Motoratón hizo comentarios y sugerencias de como bajar, uno de los muchachos se cayó y rodó bien feo como dicen por ahí, pues los peraltes estaban “Trifásicos” el sendero con arenilla y gravilla fina listos para derrapar y agarrar los peraltes sin salir volando o disparados debido a la velocidad más la pendiente del camino, justo antes del recodo y posterior peralte vi un letrero: “Precaución, Descenso Rápido de Bicicletas” lo cual me hizo pensar en los caminantes que de vez en cuando deambulan por ahí por desconocimiento o por retar al ciclista de montaña no lo sé, a fin de cuentas lo mejor es prevenir un accidente y respetar los espacios ya que están marcados para cada modalidad deportiva.

Fin del recorrido y punto de retorno.

Los caminantes del sendero deben tener cuidado al andar por los senderos.

   Bajé la 1era curvita cerrada y me encontré con los muchachos que habían bajado antes que yo, estaban haciendo fila esperando a nuestro guía, que de hecho, hizo una demostración de cómo bajar el peralte. Debo admitir que hay que tener mucha técnica y conocimiento para hacer ciclismo de montaña, estar consciente de la velocidad, conocer la pista y sobre todo estar consciente de que cualquier error puede costar un brazo, pierna o la vida y no es ser fatalista, es ser realista.

Nuestro guía "Motoratón" en acción.

   Luego de eso continuo con una breve explicación sobre un “salto” seguido de otro peralte y así continuar el descenso poco a poco…Los muchachos hacían fila para ir bajando uno por uno.

Uno de los "saltos" simples.

   Rápidamente al pasar el saltico, el descenso es extremo, como para bajar a toda velocidad con un rocksito del bueno (System of a Down, Megadeth, Iron Maiden, etc.), full adrenalina, debo admitir que algunos recodos los pasé en la bicicleta y otros a pie debido a lo cerrado y lo inclinado (mala combinación para un novato como yo). Practicamente fui el último en bajar en compañía de una de las muchachas de Cocobike, poco a poco sin apuro hasta llegar al conocido recodo “La poceta”.

El recodo "La poceta"

   Al bajar poco a poco, justo en el último salto entre la derecha y la izquierda en el último segundo tomé el camino de la derecha hice un micro salto, y ¡!zaz! me estrellé contra la vegetación (creo que hay un vídeo de eso) lo importante fue esquivar una rama cortada recientemente la cual me rasguño la mejilla derecha porque iba directamente a vaciar mi ojo derecho.

   Ahora bien, para concluir, debo reconocer que el ciclismo de montaña es otro nivel, se necesita una dosis de locura, una buena máquina y un seguro médico, a pesar de los detalles, sigo enamorado de practicar esa disciplina, me voy con mucha humildad y respeto del Óvalo de Turmero, sin embargo, espero volver pronto y volver a hacer el recorrido aunque sea dos veces. La aplicación Relive arrojó un recorrido de 20.4 km durante el regreso, pues el teléfono móvil se había recalentado y desactivó las aplicaciones, por lo que el total recorrido fue de 41 km aproximadamente.

Profesor de Biología, naturalista, aprendiz de Fotografía y Zoología con énfasis en la Diversidad Biológica Venezolana.