Serpientes de Venezuela: Un resumen sobre su biología.

Toda persona que realice actividades al aire libre debe tener en conocimiento información relacionada con la identificación correcta de una serpiente, así como saber que se debe hacer y no hacer ante el encuentro con una de ellas o en el peor de los casos una mordedura, sumado al hecho de conocer las medidas preventivas del envenenamiento causado por mordedura de serpiente, picadura de avispas, escolopendras, abejas, y demás fauna venenosa, el post de hoy es un resumen sobre las serpientes de Venezuela y algunos aspectos básicos sobre su biología.

Coral, Candelilla / Micrurus dissoleucus.

   Venezuela es un país megadiverso, actualmente se encuentra entre los diez países con mayor diversidad de anfibios y reptiles del mundo y al mismo tiempo entre los primeros seis de América Latina. Hasta la fecha se han reportado 215 especies y subespecies de serpientes en el país (Natera et. al. 2015) esta cantidad se divide entre 8 familias, las cuales se citan a continuación: Anilidae, Anomalepididae, Boidae, Colubridae, Elapidae, Leptotyphlopidae, Typhlopidae, Viperidae.

   Ahora bien, las especies que integran las familias Elapidae (Corales) y Viperidae (Mapanares, Cascabeles y Cuaimas) son de importancia médica y toxicológica debido a la toxicidad de su veneno, ya que su mordedura causa envenenamientos capaces de producir la muerte en seres humanos. Al mismo tiempo, algunas especies de la familia Colubridae secretan toxinas cuyas propiedades son de gran consideración al morder a las personas.

Mapanare / Bothrops atrox.

   Las serpientes se caracterizan por tener el cuerpo alargado y cubierto de escamas, carecen de extremidades (patas) y oído externo –solo presentan vestigios de oído interno, por lo que prácticamente son sordas y no perciben el sonido transmitido por el aire-, carecen de parpado y en su lugar poseen una membrana transparente, poseen el sentido del olfato muy desarrollado para lo cual usan la lengua y así captar los aromas ayudándose del órgano de Jacobson (son 2 orificios donde la serpiente inserta la punta de la lengua y deja las partículas de olor), el cual está situado en el paladar, algunas especies poseen órgano termoreceptor, el cual les permite percibir las variaciones de temperatura externa y corporal de sus presas y enemigos naturales, su temperatura corporal es variable, es decir, dependen de la temperatura ambiental para realizar sus actividades metabólicas, por ende, son animales ectotermos.

   Por otra parte, las serpientes presentan diversidad de comportamientos, patrones de actividad y estrategias de adaptación y supervivencia al entorno donde habitan siendo uno de los grupos zoológicos exitosos gracias a los mecanismos evolutivos. En este sentido, podemos mencionar que los patrones de actividad son diurnos-vespertinos y nocturnos, no obstante, esto “no es una regla” en sentido estricto, es decir, cada individuo, genero, especie, familia va a actuar según sus necesidades fisiológicas y ecológicas.

Raíz del Niño / Gyranthera caribensis.

   En este sentido, estos reptiles han desarrollado mecanismos defensivos interesantes y complejos que van desde patrones de coloración uniformes o irregulares, los cuales les permiten confundirse con su entorno, hay otro grupo cuya coloración les permite advertir su peligrosidad (Corales) y al mismo tiempo, otro grupo cuya coloración busca “imitar” ciertos patrones para dar la impresión de ser especies venenosas y así disuadir a sus agentes agresores, desde luego, la coloración juega un papel crucial durante la vida de una serpiente, por los que prácticamente son “invisibles” a simple vista para los depredadores y sus presas. Además de esto, algunas especies pueden abrir la boca, inflar el cuello, expulsar aire de los pulmones, producir sonidos de advertencia haciendo vibrar la cola con el sustrato o el apéndice corneo ubicado al final de la cola (maraca) y producir un ruido de advertencia.

   El escape y huir realizando movimientos rápidos forman parte de los mecanismos defensivos, de hecho, raras veces intentan morder a menos que sean manipuladas directamente, lo cual es una actividad de alto riesgo debido a que hay especies venenosas y las que no son pueden causar heridas de consideración (grandes boidos). Es importante resaltar que es poco lo que se conoce en cuanto a la etología de las serpientes, pues los comportamientos citados anteriormente son los que han sido reportados, y a su vez es una introducción al tema en este post.

Verdegallo / Leptophis coeruleodorsus.

   En Venezuela, las serpientes abarcan prácticamente todos los habitas, podemos encontrarlas desde el nivel del mar hasta los 2500 metros de altura sobre el nivel del mar siendo los encuentros más “frecuentes” por debajo de los 1000 metros (cascabeles, Mapanares, Corales, Sabaneras, Reinitas, Cazadoras, etc.) y sobre los 1000 msnm podemos observar Mapanares, Corales, cazadoras y Cascabeles. En cuanto a sus hábitos, hay especies acuáticas, terrestres, arborícolas e incluso minadores-fosoriales.

   Ahora bien, en cuanto a su alimentación podemos comentar que existen especies que depredan sobre cierto grupo zoológico, por ejemplo, las serpientes Caracoleras se alimentan de Caracoles y Babosas o Sietecueros, por lo que se les considera “especialistas” en su alimentación. Hay otro grupo que incluye aves, lagartos y pequeños roedores, por ende, se les considera “generalistas” por su puesto esto en términos generales. Ahora bien, en cuanto a la reproducción, tenemos especies que son ovíparas (nacen por medio de huevos) y especies vivíparas (las crías nacen vivas, son expulsadas por la madres a través de la cloaca).

Reinita / Erythrolamprus melanotus.

   Esto es solo una pequeña introducción al conocimiento de la ofidiofauna presente en Venezuela, de hecho, hay que recordar que el envenenamiento causado por mordedura de serpientes es un problema de salud pública en todas las regiones tropicales del planeta.

   Ya para concluir, aún hay mucho que hacer para conocer los aspectos de la biología y ecología de las serpientes en nuestro país, por lo que lo que conocemos actualmente es gracias a la vocación y trabajos de investigación por parte de investigadores, científicos y educadores ambientales que se han dado la tarea de dar a conocer la información recopilada en artículos científicos/divulgativos a través de los últimos años y que desde luego se actualizan.